El inicio de un
largo camino
“A la semana
siguiente, yo me dije –narra Alicia-: como ciudadana argentina, como madre y
como maestra, yo no puedo quedarme con los brazos cruzados, con mentiras. A los
chicos hay que decirles la verdad. Por mis convicciones democráticas inicio
juicio a la Armada
Argentina en la semana siguiente de Trelew.”
El 20 de octubre por orden del juez se realiza la
autopsia. Una segunda autopsia se realiza unos meses después. Alicia presentó
ante el tribunal el certificado de defunción de Rubén, ocurrida en la Base Almirante Zar de Trelew. A las 12.55 horas fallece por
muerte violenta. Este certificado esta firmado por el Dr Lois. En todos los
partes que están consignados en los diarios dan a Rubén Pedro Bonet como
herido. Lo mismo sale de los partes que recibe la Dirección de Inteligencia
de la Base. Esto significa que luego de varias horas herido, Rubén es rematado.
Al poco tiempo de los hechos de Trelew Alicia es citada para ir a la cárcel de Devoto,
donde estaban los sobrevivientes. Alicia es citada
el 23 de octubre de 1972 en la unidad carcelaria donde se constituye el juzgado. Comparece el letrado del Estado Nacional, Ibarborde, abogado
de la Marina.
Comparecen Camps, Haidar y Berger.
En el marco de esa causa, Ibarborde indica quiénes
fueron los que participaron de los fusilamientos: Sosa, Bravo, Del Real,
Herrera, Marandino y Marchand. Para ese momento, se comprueba que Sosa y Bravo
ya están en Estados Unidos.
“A partir de estos elementos –sigue Alicia- tengo la convicción de que mi esposo fue
asesinado dos veces: una a las 3.30 y otra a las 12.55 horas. La pregunta es
quién tiro el tiro que mata a Rubén a las 12.55. Una persona lo asesina en
lugar de trasladarlo a la enfermería. Si no hay respuesta a esta pregunta quiere
decir que en la persona de Rubén Pedro Bonet se sintetiza la decisión de
aniquilar a las 19 personas que estaban bajo la custodia de la Armada Argentina. Era el acto de pensar de una manera
diferente, que nos corresponde a toda una generación. Era una semilla que estaba creciendo. Que en la cárcel se habían
formado las organizaciones y se habían puesto de acuerdo en hacer un acto en común,
que no se prestó asistencia médica… Yo saco la conclusión: eso se llama terrorismo
de Estado, y cuando se mata porque no se está de acuerdo con las ideas, con la
religión, con la raza, es un genocidio.”
El juicio se interrumpió con la asunción Cámpora y la amnistía. El día de la liberación están los tres
sobrevivientes. Allí Alicia se encuentra con ellos y tienen la posibilidad de
relatarle los hechos. Berger, Haidar y Camps le cuentan que cuando Bautista,
hoy imputado por encubrimiento, va a tomar las declaraciones les hacen repetir las cosas
varias veces, les hacen preguntas, les muestran pistolas para ver si reconocen
material. Ellos, que estaban gravemente heridos, continúan respondiendo a los
interrogatorios porque tienen conciencia de que todo lo que aporten puede servir.
Desconocen qué rol tiene quien está adelante. Transcurre 1973 y no hay grandes avances.
Muere Peròn, queda Isabel. Se produce lo que todos conocen como las 3 A.
Alicia se casa en segundas nupcias en el 74, mismo año
en que asesinan a Rodolfo Ortega Peña en las calles de Buenos Aires. Alicia
junto a su familia pasan a la clandestinidad desde el 2 de agosto de 1974 al 7
de julio de 1977, y entretanto también asesinan a Susana Gaggero, la compañera
de Pujals. Alicia recibe asilo político en Francia, ya en 1978. “Allí denunciábamos
lo que estaba pasando en nuestro país con lo que íbamos sabiendo. Hasta ese momento
no sabíamos de los campos de exterminio, que robaban bebés”, cuenta.
“Yo escribía artículos desde la clandestinidad a los
maestros argentinos para que contaran la verdadera historia de la masacre de Trelew,
a los senadores y diputados argentinos para que hicieran lo necesario para que
se realice el juicio. Cada 22 de agosto envío un recordatorio que sale
publicado en Pàgina12, donde firmo Familiares
de Trelew. En 2004 el presidente Kirchner me invita a venir a la Argentina.
En Casa Rosada soy recibida junto a la mamá de Capello y Alicia Sanguinetti,
presa política. Y me dice: “Usted que viene luchando desde hace tantos años…
ahora que se derogaron las leyes [de punto final], ¿qué es lo que quiere?” Yo le
entrego un papel en el que pido se reabra el Juicio de Trelew, que el
aeropuerto de Trelew se convierta en espacio de memoria, y se reabran los
archivos de la Armada. El presidente delante de las cámaras esa noche, eran las
diez de la noche, nos dice que pondrá a disposición todo lo que esté a su
alcance sin interferir en la Justicia.”
Hoy llegamos a un Juicio.
Entretanto María Antonia Berger fue asesinada en 1979
y su cuerpo fue mostrado en la ESMA como trofeo. Alberto Camps murió asesinado
en su casa en agosto de 1977.
Ricardo Haidar está desaparecido desde 1982. Los padres
de Mariano Pujadas, José María y Josefa, junto a su hija María José, su hijo
José María y su compañera Mirta fueron secuestrados y asesinados el 14 de
agosto de 1975. El hermano de Susana Lesgart es arrestado en 1976. Sus hermanas
Amelia y Adriana se encuentran desaparecidas desde 1979. El hermano de Clarisa Lea
Place, Luis, fue detenido, su padre Arturo asesinado, su tía herida y su casa
volada. El hermano de Capello, junto a su compañera y su hija fueron
secuestrados y desaparecidos. Mario Santucho fue asesinado en un enfrentamiento
en 1976. La familia Santucho perdió diez vidas. El hermano y el padre de
Fernando Vaca Narvaja fueron asesinados en 1976. Alberto Camps recibe un
balazo, y es desaparecido. Identificaron su cuerpo en el año 2000. Su compañera
fue secuestrada y desaparecida. Roberto Quieto fue secuestrado y desaparecido. Marcos
Osatinsky fue asesinado, y luego sus hijos mueren en un enfrentamiento. Domingo
Mena, fue desaparecido junto con su compañera. Paco Urondo fue asesinado en 1976,
su esposa desaparecida, y su hija Ángela recuperó su identidad luego de años de
apropiación. Raimundo Gleyzer y Elvio Ángel Bel son detenidos y desaparecidos en 1976.
Entre los abogados Rodolfo Ortega Peña es asesinado en
Buenos Aires; Mario Amaya muere luego de torturas en la cárcel; Solari Yrigoyen
es víctima de un atentado de las 3A.
Eduardo Luis Duhalde nos acompañó hasta las puertas de
este juicio.
En el último decreto que el General Lanusse firma antes
de pasar el poder nombra para prestar servicios en la Agregaduría Naval Argentina
en Estados Unidos a Luis Emilio Sosa, fusilador de Trelew, recibe honores. Bravo
y Marandino también son enviados a Estados Unidos.
“Creo que con
todos los elementos que he podido darles en este momento, esto fue un acto de
terrorismo de Estado. Y dejo en sus manos lo que he esperado de la justicia
durante 40 años. Cuando ustedes rindan justicia van a escribir una página
fundamental de la historia argentina. Sus nombres van a quedar cualquiera sea
el veredicto, y se dará la pena que está de acuerdo a la Constitución. Ese día
yo y los otros familiares que quedan vivos vamos a enterrar a los diecinueve
muertos de Trelew en paz y dignidad. Y sino, seguiré luchando.”
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